Buscará CANAPAT contacto con AMLO para informar realidad con normalistas

Toluca, Méx.- Odilón Lopez Nava, Delegado de la Cámara Nacional del Autotransportes de Pasaje y Turismo del Estado de México (Canapat), informó, que después de la liberación de los operadores y unidades que fueron retenidas en la Normal Rural de Tenancigo, solo han establecido contacto con el Gobierno estatal a través de la Secretaría General de Gobierno y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), pero pidió que no se quede en el limbo este tema que atentó contra los derechos humanos de los trabajadores de las empresas transportistas, no obstante, buscarán reunirse con el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador para darle a conocer la situación real con los estudiantes.

El líder de la CANAPAT, informó que al momento, las pérdidas por daños en los autobuses aún no están cuantificadas, puesto que un gran número fueron devueltas con dañaron en interiores, en las cámaras de videovigilancia, sin ventanas, por lo que prevén en próximos días tener las cifras estimadas de los daños así como las pérdidas económicas generadas por los días que las unidades estuvieron retenidas.

Indicó que tras la liberación de los operadores, tal como se estableció en el acuerdo con la Secretaría de Gobernación (SEGOB) equivale a que este asunto ya esté resuelto y el hecho de que se les haya otorgado las 87 plazas que los normalistas exigieron, es evidencia de impunidad y falta de información ante la gravedad del tema con el titular del Ejecutivo Federal, por lo que aseguró que establecerán acercamientos para darle a conocer la situación real. Sostuvo que como cualquier ciudadano, no responderán con violencia, tal como lo hacen los normalistas, no obstante, este sería el último recurso al que llegarían en caso de que la situación siga igual.

Operadores liberados y quienes omitieron su identidad, mencionaron que el miedo y tensión se apoderó de ellos cuando los normalistas los secuestraron con las unidades. Indicaron que más de 60 jóvenes iban armados con palos, tubos, piedras al momento de la extracción de las unidades de las terminales o las paradas. Aceptaron que una vez que los ingresaron a las instalaciones de la Normal de Tenería, no los maltrataron, recibieron sus alimentos los días que estuvieron retenidos, a algunos los tenían incomunicados mientras a otros sí hablaron con sus familiares.