¿Conoces a Bradescard?

Siempre que se tiene algún problema con las tarjetas de crédito, préstamo o instrumento de crédito, contamos con la CONDUSEF, que por cierto cuenta con un servicio en pro de la ecología y acepta quejas y denuncias en su página web, situación que genera confianza puesto que tal aclaración debe darse en menos de 30 días, por lo que se logra un máximo de eficacia, pero no todo es miel sobre hojuelas
La CONDUSEF solicita que las instituciones financieras se inscriban y acaten los ordenamientos aplicables, particularmente ingresan instituciones serias como BBVA, City Banamex, Santander, Banorte, etc., sin embargo, cabe señalar que este tipo de grandes empresas, ya brindaban un servicio semejante, incluso antes de que existiera la obligación, derivado de la seriedad de sus productos y de los valores que ejercen día con día.
Pero ¿qué pasa con los créditos que se ejercen con tiendas como C&A, Suburbia o Promoda?, ¿cómo otorgan créditos a sus socios?, pues la respuesta es fácil, contratan a una institución de crédito, que se disfraza de prestador de servicios. ¿Por qué menciono que se disfraza de un servicio? Pues porque tal institución como Bradescard, no se encuentra avalada como institución financiera, a pesar de que ellos mismos se mencionan como tal, con los servicios de crédito, con consejos financieros y como una empresa confiable para otorgar el crédito.
Entonces ¿cómo una empresa prestadora de servicios financieros, no se encuentra obligada a responder a la CONDUSEF y sobre todo, no le aplica la Ley de la materia? Pues siguiendo tal absurdo, la respuesta es un rotundo no, debido a que tal empresa establece tal acción como un servicio y no como un objeto financiero, así de fácil, así de absurdo.
Podría hablar de otras instituciones que se presentan como institución financiera pero no lo son, ni están avaladas por la CONDUSEF, pero todo esto significa, que cuando tenemos problemas con ese “servicio” no puede intervenir la CONDUSEF sino quien interviene es la PROFECO, institución a la que le faltan legalmente hablando, herramientas para poder ejercer con contundencia sus atribuciones.
Pues viene aquí el absurdo legal. Toda la protección de tus datos personales, sensibles y todo lo concerniente a tus finanzas incluidos ahí los datos del Buró de Crédito y del Círculo del Crédito, no sirve de nada ante empresas proveedoras de servicios financieros que se dan como servicios cualquier, porque no están reconocidas como instituciones de crédito, es decir, si eres víctima de un robo de identidad, fraude o cosa parecida, por instituciones que no reconoce la CONDUSEF, tu problema es atendible sin obligación alguna por la propia empresa, que si no reconoce tu queja se convierte en un asunto de materia Civil ante los tribunales correspondientes. Se pierde la coercitividad de la aclaración del crédito, los tiempos rápidos de respuesta aunque tal problema impacte en tu historial crediticio con total contundencia como si fuese de un banco. Existe un halo de impunidad al respecto.
Así que cuando ejerza algún crédito, hágalo preferentemente en instituciones reconocidas por la CONDUSEF, cuiden sus datos ante este tipo de empresas crediticias, y esperamos en breve tanto la CONDUSEF como PROFECO generen un mecanismo para evitar y proteger a la sociedad ante el robo de identidad que va en aumento.