La otredad del poder

Aunque el título de esta nota parezca que es sacado de una experiencia de introspección psicológica y de retórica metafísica, no es más que una simple reflexión que nos atañe a todos en estos días.
Cuando roban nuestra casa ubicada en la colonia Morelos aquí en Toluca, tal vez pensemos que los ladrones viven en la colonia Santa Bárbara, pero ellos cuando son víctimas de un acto de delincuencia, piensan que son los que viven en la zona de la “Retama”; si preguntan con ellos, se sienten inseguros de visitar una fiesta en las colonias circundantes al Seminario; pero en general, cuando se roban algún coche pensamos que se lo llevan a la CDMX a cambiarle los números y venderlo en pedazos, iguale que ellos piensan que los coches robados allá, se lo llevan a Nezahualcóyotl. En resumen, cuando algo malo nos sucede ¿de quién es culpa? … del otro. Si nos corren del trabajo es por culpa del jefe, si nos reprueban en clase es culpa del profesor y todos estamos mal por culpa del gobierno. Mucho se arreglaría pensando que la culpa de que nos corrieran es la mala disposición para el trabajo, la culpa de reprobar es no haber estudiado y que nuestra realidad jamás la va a cambiar el gobierno entrante.
Este mismo concepto de otredad lo ejercita muy a menudo Andrés Manuel López Obrador. Quienes lo critican forman parte de la prensa “fifí”, los que se manifiestan inconformes de la inseguridad son los grupos que sirven al antiguo régimen, las calificadoras económicas que dicen que México no crece es porque continúan sirviendo al poder conservador; es decir, para AMLO todos lo que no le aprueben, pertenecen a sus adversarios.
La otredad se manifiesta como una forma de explicar que los tuyos no están de tu lado, porque aceptar que las críticas vienen desde adentro de las personas a las que pertenece uno, pues duele; duele o sentirse criticado con verdad o traicionado con mentira. Así pues, el gobierno federal desestima las críticas todo el tiempo, quitándole la magnitud tan importante que tiene una buena crítica si la conviertes en consejo. (Para mayor referencia visualizar la recopilación que hace El Pulso de la República, en Youtube, titulado Adiós Evo (ni hablamos de él))
Pero como dice el refrán y cita bíblica -dependiendo la Biblia- “criticas la paja en el ojo ajeno y no ves la viga que tienes en el propio”, aquí en El Valle no nos queda más que pedirles reflexión. Si somos padres de familia, jefes, o algún ente de autoridad, entender que no todas las críticas destruyen, no todas las críticas son dañinas y que si existen críticas recurrentes, debemos tomar otro refrán: “si el río suena, es que agua lleva”, en el entendido de darle otro enfoque y nos ocupemos de tratar de ejecutar nuestras acciones de una mejor manera para con nuestros subordinados, hijos, parejas, y un largo etc.
Retroalimentación [email protected]