CÉDULA PERSONAL, POSTERGADA Y NADA NUEVO.

La Ministro de la Suprema de Justicia de la Nación, ahora en retiro, Olga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila, y desempeñando actualmente el cargo de Secretaria de Gobernación del Gobierno Federal, ha puesto una vez más en la mesa un interesante pero nada nuevo tema: la funcionalidad y la instauración de una cédula única de identidad nacional.
En el libro “Disquisiciones Notariales del Estado de México” (Flores Editores, 2016) de mi autoría señalo que desde febrero de 1975 esta necesidad jurídica ya se había abordado, en un primer término, como una propuesta en la tesis profesional que sustentó el ahora licenciado en derecho Mario Alberto Maya Schuster, denominada “La Cédula de Identificación y Estado Civil de las Personas (implantación y consecuencias)” (Facultad de Jurisprudencia, UAEM), que defendió ante los sinodales René Sánchez Vértiz, Germán García Sánchez, Eduardo Uribe Santín, Onésimo Reyes García y Teodoro F. Sandoval Valdés, propuso la implantación de dicha cédula y argumentaba que “al estado y a la sociedad…les interesa conocer…el estatus personal, familiar, político y social de todos y cada uno de los miembros que la integran…y porque…la falta de identificación plena de las personas físicas, crea problemas e inseguridad…”
30 años después de hecha esta aportación jurídica, la Secretaría de Gobernación instrumentó, desarrolló y entregó a la ciudadanía algo muy parecido al modelo propuesto por el sustentante referido: la Clave Única del Registro de Población, por acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación el 23 de octubre de 1996, que en un primer tiempo se entregó a los alumnos de las escuelas de educación básica, y posteriormente a los causantes (personas físicas) en materia fiscal.
Más tarde, el 28 de julio de 2009, el Presidente de la República (él sí, con mayúsculas) Felipe de Jesús Calderón Hinojosa anunció la creación, en el transcurso de su administración, de la Cédula de Identidad Ciudadana, la cual contaría con los más modernos y confiables elementos de identidad biométrica de cada mexicano que permitiera, además, ser una garantía legal de la identidad, personalidad jurídica, unicidad y de la distinción plena que cada persona tiene respecto de los demás.
Si bien es cierto, como ha dicho Sánchez Cordero, que este proyecto no inicia desde cero -porque en el Instituto Nacional Electoral ya tienen registros con datos biométricos de los ciudadanos mexicanos en edad de votar y en la SEGOB se cuenta con las actas de nacimiento (y de defunción) y varios millones de CURP’s de menores de edad a quienes hoy, por cierto, es de vital importancia dotar desde su nacimiento de un documento confiable de identificación, tanto para las autoridades y la sociedad en general, principalmente por razones de seguridad y para la imputabilidad penal- prevén que quede debidamente implementado hasta el año 2022.
En tanto, la verdadera la urgencia social y jurídica en temas torales, nacionales e internacionales, está subsumida en una interminable procesión de descocadas ocurrencias…
FERIA DEL REBOZO TENANCINGO 2019. Pareciera ser que la Feria del Rebozo que desde hace poco más de quince años se ha llevado a cabo en Tenancingo, México, está condenada a perderse. En esta edición 2019 se apreció un total divorcio entre su esencia original, organización y autoridades. Los artistas del rebozo fueron arrumbados por un lado, el programa cultural por otro; la primera autoridad municipal, ausente. Sin embargo, la octava regidora, Aurelia S. Reynoso Villanueva, demostró su entereza durante los tres días que duró el evento; atendiendo inmejorablemente a los invitados, checando el detalle de las participaciones de los artistas locales y de los representantes de los medios masivos de comunicación, de la colaboración de la Secretaría de Cultura del Estado de México (con el Octeto Vocal, el dúo “Voz entre Cuerdas” integrado por la soprano Jeorgina Tavira Medina y el guitarrista Javier Hernández Tagle, así como con el quinteto de cuerdas “Guadalupe Olmedo”), pendiente del desarrollo del ferial tanto en la explanada del Jardín Morelos como en el Salón Fiesta, en donde estuvo la expo-venta de impresionantes y verdaderas obras de arte expresadas en lienzos y rapacejos de rebozos. Las ya tradicionales Ferias del Obispo y del Rebozo en Tenancingo son las mejores expresiones de unidad entre las autoridades y su pueblo…contra todo pronóstico, sólo el auténtico pueblo tenancinguense y sus tradiciones seguirán…
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