Viejos los cerros y reverdecen!

El tema de por sí es álgido, irónico y muchas veces pasa (para muchas gente) en lo ridículo; las expresiones saltan sin ton ni son y solo llevan dardos venenosos a fin de hacer mella en quien la escupen, aunque al final de la historia queda algo mejor para el día siguiente. Varios han comulgado con referencia a una “mejor” versión de sí mismos y pudiera ser el caso de que en ocasiones, algunas diría, se da este hecho, pero la mayoría solo consiste en una absurda competencia que la vida misma se encarga de colocarnos a todos.
Me estoy refiriendo a lo que a muchos resulta el llamado de la esperanza en aquellos deportistas que rebasan los 40 años de edad y aún siguen bregando con mucha sabiduría en el terreno de su especialidad, aquellos que a pesar de la condición inevitable del padre cronos aún conservan ciertas habilidades físicas pero que enaltecen con la alta capacidad del conocimiento adquirido y esa combinación es altamente efectiva; claro está que en otras tantas ocasiones sucumben ante la fortaleza de alguien menor.
El caso más referido en estos momentos es el del multicampeón de boxeo Manny Pacquiao, quien el sábado pasado enfrentó un reto más a su longeva y multifacética carrera, al subir al ring a combatir (auténticamente) contra un peleador menor que él. Derivado de esto, la estrategia que empleo el filipino ha sido el común denominador de toda una vida, es decir, los conocimientos adquiridos, más la fortaleza mental aplicada en un plan de alcanzar y “cazar” a su rival, fue la condición que rindió frutos y una vez más saliera del ring con el brazo y puño en todo lo alto.
Esto demuestra que en infinidad de casos y máxime en el deporte,la experiencia hace y marca la diferencia y por más que se diga con relación a que la juventud se impone, pues me parece que queda en el ejercicio de todo ser humano el ímpetu, coraje y determinación que aunado con el conocimiento adquirido van generando una condición por demás interesante que permite alcanzar el éxito. Cierto, durante la juventud se quiere correr y llegar lo más rápido posible y no es que este mal esa premisa, pero sin duda alguna lo más importante es mantenerse y crear mejores expectativas con relación a calidad y no cantidad, con mentalidad de acero y denotar en otros lo que puede significar una enseñanza de vida y consolidar el paso a paso.
Me queda claro que los ejemplos saltan a la vista, hay deportes que por más fuerza requieren dedicación y entrega al máximo pero la sabiduría que otorga el paso de los años y a pesar de los dichos como: ruco, viejito, anticuado y todos los que me quieran decir, son complejamente parte de una historia de vida que requiere un mantenimiento en toda la estructura del ser humano, no en balde ese adagio que dicta que más sabe el diablo por viejo que por diablo…
Pásenla bien!!!